sábado, 30 de enero de 2010

Península Valdés, naturaleza salvaje





Península Valdés:

"Este lugar no es un Hospital pero el silencio aquí es igual de importante". Así de contuntende nos recibía un cartel informatvo al inicio del sendero. A juzgar por lo amenazante del mensaje empezamos nuestro trayecto con la sensación de que algo importante estaba sucediendo abajo del acantilado. Caminando sigilosos nos entrontramos de immediato otro cartel con un mensaje algo más suave e incluso persuasivo: "Guarden silencio y escuchar la naturaleza". El grado de intrigo y misterio aumentaba en nosotros a pasos agigantados. Como dos detectives novatos avanzábamos concentrando nuestros esfuerzos en nuestros sentidos más periféricos: la vista y el oído. En seguida empezamos a escuchar no muy lejos de nuestra posición, algunos rugidos ensordecedores. Nuestro corazón empieza a acelerarse y una sonrisa nerviosa empieza a aparecer automáticamente en nuestra faz. Los rugidos feroces se hacen más fuertes y cercanos a medida que nos acercamos más... De repente, de entre la maleza del camino, un animal a paso lento se interpone en nuestro camino ¿Qué es esto? Abro la guía e identifico rápidamente su nombre: !Armadillo! Seguramente el pobre animal se merecía más atención, pero hipnotizados por el ruido ensordecedor que oíamos de fondo no podíamos entretenernos con el gracioso animal acorazado. Llegamos al acantilado. Nos disponemos detrás de un arbusto y observamos en silencio absoluto el tremendo espectáculo que tenemos delante. Mi boca se abre de emoción y me froto fuerte los ojos para corroborar realmente si loque estoy viendo es o no un sueño. Mi cámara fotográfica hecha humo!!! Delante nuestro, a menos de 15 metros, una manada de leones y lobos marinos en plena época de reproducción. El guarda dice que hay unos 800, entre ellos 300 crías. De telón de fondo para engrandecer más la escena, un océano atlántico de un color azul cielo despampanante con orcas flanqueando el horizonte. Éstas últimas no las podemos ver, pero se intuyen en la tensión del ambiente...
30-01-2010